Concierto + acción = Conciertacción. Viernes 21, desde las 19'30h.
CONCIERTO + ACCIÓN = ¡CONCIERTACCIÓN! VIERNES 21, POR LA INACCIÓN DE LAS ADMINISTRACIONES PÚBLICAS QUE CONDENAN A MUERTE AL CENTRO HISTÓRICO. La Asociación Cultural El Arrabal de San Miguel convoca una concentración, un acto performance de denuncia, que tiene por objeto volver a manifestar nuestro malestar por el estado de abandono y de peligro que supone el solar situado en la esquina de las calles Pollo y San Antón de Jerez de la Frontera. Ya el 17 de junio de 2016 nos manifestamos con el mismo fin parodiando la inauguración de un centro de arte contemporáneo (https://www.youtube.com/watch?v=r3ICw-YbOg8), pero ante la inacción tanto de la propiedad como de la Administración competente, nos sentimos en la obligación de volver a manifestarnos con el mismo fin. En esta ocasión la performance consistirá en una CONCIERTACCIÓN, un juego de palabras que resulta de la suma de concierto y acción, dando como resultado una concentración de concienciación, una CONCIERTACCIÓN. El programa de la acción será el que se detalla a continuación: 19'30h.: Exposición fotográfica de Sherry for Sarajevo y Jerez, ciudad de vacaciones, que nos ofrecerá un pequeño reportaje gráfico sobre el abandono que sufre el centro de nuestra ciudad. Esta exposición se llevará a cabo en El Corral de San Antón, en la calle San Antón número 5, y mostraremos también cómo la inacción de la Administración Pública hizo peligrar la rehabilitación de este Corral. Cabe recordar que El Corral de San Antón tiene firmado un Acta de Compromisos con la Delegación de Vivienda de la Junta de Andalucía desde el año 2009 y que, tras años de no obtener respuesta alguna, el pasado año decidió interponer una demanda judicial contra esta Delegación, viéndose en la obligación de romper el acuerdo firmado ya citado y así poder dar comienzo a las obras de rehabilitación del mismo. 20'30h.: Conciertacción. Concierto denuncia con la colaboración del grupo jerezano Nube Sónica. El acto, tal como se ha citado ya, será una performance de denuncia.
El lugar del mismo será junto al solar que une las calles San Antón con Pollo, un agujero de unos 150 metros cuadrados y unos 3 metros de profundidad. Este solar, abandonado desde hace más de una década, supone un peligro constante para la seguridad y la salud por la posibilidad de caídas, infecciones, plagas de gatos y de pulgas y otros insectos, malos olores, etc. Sabemos que la solución no es fácil, pero olvidarse del problema y silenciarlo no acabará con él. Y entendemos que si el propietario de la finca no puede hacerse cargo de las posibles soluciones, es el Ayuntamiento de Jerez quien debe velar por el bien común de sus ciudadanos/as. Al volver a encontrarnos los vecinos y las vecinas para tratar este problema de manera común, hemos vuelto a descubrirnos en la necesidad de retomar las relaciones vecinales que se van perdiendo tal como avanza la Historia. Asi que no sólo reclamamos una solución urgente para este solar, sino que tenemos la necesidad de seguir conociéndonos y relacionándonos. Es por ello, que como solución, hemos pensado que el solar podría ser cimentado a nivel de la calle y hacer en su espacio una pequeña plaza pública, con un mínimo equipamiento (un par de bancos y algún árbol), que sirva de lugar de esparcimiento y encuentro para los vecinos y las vecinas, ante la carencia de este tipo de espacios en nuestro barrio. Sabemos que estamos hablando de una propiedad privada, pero si ésta no puede responder, el resto no podemos ser quienes sufran las consecuencias de este abandono. No estamos inventándonos nada nuevo, pues este tipo de colaboraciones
y acuerdos existe ya en otras ciudades, con microconvenios de colaboración en los que solares abandonados son cedidos de manera temporal a los vecinos y vecinas del barrio. Consideramos que nuestra casa no es sólo de puertas para adentro, sino que nuestro hogar debe ser todo aquel espacio que forma parte de nuestro día a día, y que este hecho marca sin duda parte importante de nuestra identidad, ya que una zona geográfica tan rica en luz solar, estaba conformada por casas de habitaciones pequeñas, oscuras y poco ventiladas, con lo que gran parte del día a día se vivía fuera de las casas, en los patios de vecinos y en las calles y plazas de los antiguos barrios, conformándose una identidad comunitaria basada en relaciones de colaboración y cooperación que poco tienen que ver con las actuales.